Parece inevitable que en las próximas semanas/meses se ponga en marcha un nuevo incentivo económico en EEUU, por ahora el presidente de la Fed sólo reiterado sus intenciones.
Quizá lo que parece preocuparle más a Ben Bernanke y uno de los datos macroeconómicos que más pueden presionar este tipo de decisiones, es la tasa de desempleo. Estados Unidos no ha logrado reducirla del 8% en todo el año, y es que el presidente de la Fed parece estar preparando la mesa para poner en marcha algo que da la sensación de ser inevitable.
Sin embargo, mientras la fecha, las condiciones o la forman no sean claras, sólo queda seguir especulando, como ya se ha venido haciendo en todo el mes de agosto. Pero, si en algo tenemos que estar de acuerdo es en que lo sucedido este viernes en Jackson Hole, es que la Fed ha logrado mantener la llama encendida.
Uno de los actores más sensibles a las declaraciones de la Reserva Federal es el dólar, y aunque ya se ha depreciado constantemente en los últimos 31 días, bajo el mismo efecto -los rumores de incentivos fiancieros- permite al euro alcanzar máximos de dos meses antes de finalizar el mes vacacioncita por excelencia. Tras las palabras de Ben Bernanke la divisa comunitaria logró cruzar la barrera de los 1,26 dólares, aunque más tarde se desinfló y cotiza en torno a los 1,256 dólares, al anotarse un alza del 0,5% contral el billete verde.
Mientras los mercados se mantienen a la expectativa de lo que pueda suceder durante septiembre, cuando nos volveremos a encontrar con declaraciones del presidente de la Fed, el dólar se mantendrá asediado por la especulación ante lo mucho o poco que pueda afectar su precio un nuevo QE.
Los mercados han tenido poco tiempo en Europa para digerir lo sucedido en Wyoming, pero para Ecotrader -por lo menos- la debilidad del billete verde es algo positivo a pocos días de haber activado en cartera el cruce entre la libra y el dólar.