Aunque finalmente el dato de empleo ha sido peor de lo esperado, la especulación de que se colocaría sobre los 200.000 nuevos puestos de trabajo ha impulsado al dólar a vivir su mejor semana desde el pasado mes de noviembre.
Durante la semana, los inversores venían descontando que el mercado estadounidense habría creado más de 200.000 puestos de trabajo en abril, en el que sería el tercer mes consecutivo por encima de dicha marca. Un mercado laboral estabilizado podría adelantar los planes de la Reserva Federal de incrementar los tipos hasta en dos ocasiones a lo largo de 2016. Esto es lo que ha movido al alza al dólar.
En concreto, el Bloomberg Dollar Index se ha revalorizado en estos cinco días un 1,4% en la que ha sido su mejor semana desde el pasado mes de noviembre. Así, el selectivo que pondera los cruces más importantes del billete verde ha terminado la semana en la zona de los 1.175,7 puntos.
Sin embargo, la creación de empleo se ha frenado mucho más de lo esperado, hasta los 160.000 puestos de trabajo, el dato más bajo de los últimos siete meses, lo que ha hecho girar al dólar en la jornada del viernes.
Eso ha provocado que el euro se haya mantenido por encima del nivel de los 1,14 dólares que puso en peligro el pasado jueves. Y es que, la divisa común se ha depreciado en este cruce más de un 0,2% desde el lunes. Lo que cabe destacar es que en la semana no sólo atacó el nivel de los 1,15 dólares, sino que, en el intradía, llegó a reconquistar los 1,16 dólares.
El yen, por su parte, también se ha colocado entre las monedas más alcistas de la semana, logrando reconquistar el título de la más alcista del G-10 arrebatado por el dólar canadiense. Y es que, el Banco de Japón ha mantenido intacta su política expansiva aunque ha retrasado su objetivo de inflación del 2% por lo menos hasta entrado 2017 o incluso principios de 2018.
En el polo opuesto se han colocado las divisas commodity como el dólar australiano o el canadiense, incapaces de cerrar al alza frente a ninguno de los 10 principales cruces que monitoriza Bloomberg. Al ser monedas de economías muy dependientes de la exportación del crudo, las fuertes caídas experimentadas por el oro negro en la semana las han movido a la baja.