Si en los primeros tres días de la semana el cruce euro/dólar se mantuvo plano, la reunión del BCE fue decisiva para que la divisa común se desplomase un 3%, muy cerca de perder los 1,10 dólares.
Y es que, el presidente del Banco Central Europeo, Mario Draghi, aseguró que "estamos listos para actuar si es necesario y estamos abiertos a valorar todo el menú a disposición". Aun así, señaló que analizará en la reunión de diciembre si se amplían el QE.