Las perspectivas de una posible bajada de tipos en la zona euro llevan a la moneda única a caer más de un punto porcentual y testar los 1,28 dólares.
Aunque esta vez los tipos de interés se han mantenido en el mínimo histórico del 0,5%, una decisión descontada ya por el mercado, Draghi ha dejado la puerta abierta a una nueva rebaja en el precio del dinero, una decisión que no ha dejado indiferente a nadie.