En el continente africano es muy común encontrar cosas que en los países occidentales creíamos en desuso. Algunos ejemplos son los productos tecnológicos, que encuentran en estos estados una segunda vida, o los vehículos que hace décadas hemos dejado de ver por nuestras calles.
Pero más allá del reciclaje de lo que al norte del Mediterráneo ya no queremos, hay hasta catorce países cuyos habitantes siguen teniendo como divisa oficial el franco francés. Sí, el franco, pese a que desde los años 50 estos países dejaron de ser colonias de Francia y pese a que desde hace casi 20 años ni el propio país galo la utiliza.