El rebote en las bolsas europeas no quiere dar su brazo a torcer
Situación de corto plazo:
Las bolsas europeas firmaron ayer una nueva sesión en la que apenas hubo cambios significativos, algo que no nos sorprende puesto que todo apunta a que Europa está a la espera de ver el camino que quieren tomar los índices norteamericanos antes de decidir continuar con el rebote que nació en los mínimos de la semana de Navidad o formar un ajuste del mismo. Todo dependerá de si el S&P 500 consigue o no batir resistencias que presenta en los 2.815 puntos, desde donde a corto plazo consolida posiciones.
Las últimas subidas han llevado al Eurostoxx 50 (SX5E.ST) a aproximarse a la zona de resistencia teórica de los 3.310 puntos, cuyo alcance supondría una recuperación de la mitad de toda la tendencia bajista que se inició en los máximos de 2017, y no descartamos incluso que vaya directo a buscar su directriz bajista. Hablamos de un entorno de giro potencial muy importante desde el punto de vista técnico que además coincidiría con el alcance de otro punto de giro muy relevante como es la recuperación del 61,80% de Fibonacci en la versión total return del Eurostoxx 50.
En el chart adjunto mostramos la hipótesis que barajamos como más probable en próximas semanas. Puede verse como todavía podría haber cierto margen de subida a corto plazo pero mucho nos tememos que estamos ante el último coletazo antes de una consolidación del rebote que nació en los mínimos de la semana de Navidad. Para que las subidas puedan prolongarse sería necesario que Wall Street apoye y para ello deberíamos ver la superación de resistencias como son los 2.815 en el S&P 500.
Por el momento no vemos signos de agotamiento comprador y para tener alguna evidencia que apunte hacia ello sería preciso que el Eurostoxx 50 pierda al menos los 3.260 puntos y posteriormente los 3.223 puntos, que son los mínimos de la semana pasada.
Situación tendencial:
La tendencia que define la principal referencia europea en el largo plazo es alcista, pero llama la atención el nuevo fracaso del Eurostoxx 50 en su versión total return (SX5T.ST) tras alcanzar su resistencia creciente de medio/largo plazo que discurría por los 7.500 puntos. Desde ahí las ventas vuelven a presionar al índice y estamos viendo durante los últimos meses una corrección bajista que, de momento, se mantiene del todo vigente y que podría llevar al DAX 30 (DAX.XE) a la base del canal que viene acotando su evolución durante los últimos años, que actualmente aparece por los 9.600-10.000 puntos. Antes del alcance de este objetivo se podría formar un rebote en este comienzo de año 2019 que lleve al Eurostoxx 50 a la zona de los 3.265-3.300 puntos.
