Descensos generalizados en las bolsas europeas en el ecuador de una sesión en la que lo más destacable es ver como el Eurostoxx 50 está probando de nuevo la solidez del soporte clave que presenta en la zona de los 3.260 puntos, que es la base del lateral que viene acotando la consolidación de las últimas semanas. La cesión de este soporte sería un signo de debilidad muy importante que no tendría ningún sentido en un contexto de reanudación alcista como el que planteó la semana pasada la ruptura de resistencias en los principales índices de Wall Street así como en el DAX 30 alemán.