Nueva jornada de caídas en la renta variable europea en una sesión en la que lo más destacable ha sido ver como el IBEX 35 ha alcanzado la zona de mínimos del año pasado en torno a los 9.200/9.370 puntos. El alcance de este entorno, que debemos vigilar puesto que en el mismo podrían comenzar a sentarse las bases de un suelo en las caídas, ha coincidido con la vuelta del resto de índices europeos a la zona de mínimos de la jornada de pánico del pasado 24 de agosto, que es la que venimos insistiendo que debía ser alcanzada antes de poder favorecer la posibilidad de ver un rebote más sostenible en el tiempo.