El debate que protagonizan alcistas y bajistas en el corto plazo se mantiene muy igualado en una sesión en la que lo más destacable ha sido ver como el IBEX 35 vuelve a probar la solidez del soporte que presenta a la altura de los 10.300/10.325 puntos, de cuyo mantenimiento depende que el movimiento consolidativo de las últimas jornadas no se torne correctivo hasta soportes que aparecerían entonces en los 10.000 enteros.