Semana de cesiones para las bolsas europeas que han entrado en fase de reacción del tramo alcista iniciado el pasado 24 de junio. Lo más destacable de la semana ha sido ver como el alcance de primeros soportes clave, como son los 8.200/8240 en el DAX 30 alemán, ha servido para frenar el ímpetu bajista y para provocar un rebote que en algunos casos ha conseguido cerrar el hueco bajista que se abrió el martes en la apertura. Esto es algo que sugiere fortaleza y que encaja en un contexto de fortaleza como el que estamos viendo estas últimas semanas.
Seguimos considerando que no habrá deterioro destacable ni motivos para reducir más exposición alcista mientras no se pierdan los mínimos vistos esta semana. De hecho, gracias al rebote de las últimas dos jornadas, una nueva caída que profundizara por debajo de estos mínimos permitiría ver un claro patrón bajista en forma de cabeza y hombros, lo cual refuerza los mismos como línea divisoria que separa un escenario consolidativo de uno correctivo.