En el ecuador de la sesión lo más destacable es ver como poco a poco va tomando cuerpo el rebote en las principales bolsas europeas, si bien es cierto que está teniendo lugar con más miedo que vergüenza a la espera de ver como se comporta Wall Street, que es donde es más fácil identificar los soportes clave y que como es habitual va a jugar un papel crucial para poder confiar o no en un eventual rebote.
En el chart adjunto puede verse como el futuro del mini Nasdaq está reaccionando al alza desde el soporte clave de los 2.516 puntos, de cuyo mantenimiento depende que no se vea confirmado un claro patrón bajista. Mientras tanto, el IBEX con dividendos, que todavía no ha perdido el soporte horizontal y origen del último rebote relevante, también trata de rebotar apoyado por el patrón de velas de ayer que ya sugería esa posibilidad.