Al cierre de la sesión el Nikkei registró una caída del 2,51%, hasta los 8.719,24 puntos, lo que vuelve a situar a la principal referencia japonesa por debajo del nivel psicológico de los 9.000 enteros a cierre semanal, muy cerca del soporte clave de los 8.500 puntos.
En el gráfico adjunto se puede observar como la cesión de ese entorno de soporte de los 8.500 puntos confirmaría un patrón bajista que proyectaría al Nikkei por debajo de los 7.000 enteros. De hecho, operativamente, con la pérdida de los 8.500 puntos ya no quedarían argumentos para mantener en cartera ninguna posición en Japón.
Otro frente a vigilar y que aún invita a no cerrar completamente la posición Nikkei es el hecho de que el dólar / yen siga manteniéndose por encima del soporte fundamental de los 76,40 yenes por dólar. La cesión de este soporte situaría al dólar en caída libre absoluta frente al yen, lo cual sería nefasto para la renta variable nipona.