Todavía no podemos descartar que el BBVA (BBVA.MC) forme un nuevo latigazo bajista que lleve a su cotización a alcanzar la zona de soporte teórico de los 3,80 euros, que son los mínimos del año 2016. Si finalmente se formara esa caída estaríamos a priori ante una muy buena oportunidad para tomar posiciones en el BBVA en busca de que desde ese soporte clave el banco consiga revolverse al alza de un modo contundente. Para que se aleje el riesgo de ver esa caída a soportes de medio / largo plazo es preciso que el rebote de corto consiga cerrar el hueco que abrió a partir de los 4,55 euros. Es lo mínimo exigible para dar fiabilidad al rebote de corto plazo.