Pocas variaciones en las bolsas europeas en el ecuador de una sesión en la que los principales índices de referencia consolidan posiciones sin dar ninguna muestra de debilidad. Lo más destacable es que el Ibex 35 se aproxima a los máximos del pasado marzo, que es lo que debe de superar para reforzar en mayor medida el soporte de los 9.100 puntos y para abrir la puerta a mayores subidas.
El Ibex 35 es el único índice europeo que a corto plazo no ha conseguido marcar un nuevo máximo anual y creciente dentro del movimiento alcista que nació en los mínimos de Navidad, pero visto el comportamiento de sus homólogos europeos todo apunta a que en breve lo logrará y esto permitiría dar por concluida la consolidación y abriría la puerta a un contexto de mayores alzas. Operativamente, hay que tener presente que el soporte de los 9.100 puntos sigue siendo la línea divisoria que separa una consolidación previa a mayores alzas de una corrección que podría llevar al Ibex 35 a los 8.800 puntos, dependiendo de si se mantiene en pie o se pierde respectivamente ese soporte. Aquellos que quieran invertir en renta variable española deberían hacerlo valorando como stop ese nivel de los 9.100 puntos del Ibex 35. En el más corto plazo no habrá una debilidad destacable mientras no pierda los 9.320 punto, que podría ser utilizado como un stop más agresivo.