A lo largo de los últimos meses la cotización de Repsol (REP.MC) está tratando de sentar las bases de un proceso de reestructuración alcista. Para que tome cuerpo debe de batir el entorno de los 15,50 euros, lo que abriría la puerta a una probable vuelta a sus máximos históricos.
Lo más destacable en el corto plazo es que consolida posiciones y presiona la directriz decreciente que discurre por los 15,20 euros y la resistencia intermedia de los 15,25 euros. Superar este entorno provocaría probablemente la superación de los 15,50 euros, por lo que incluso de una forma agresiva podrían plantearse compras si a cierre de sesión se alza sobre los citados 15,25 euros. En caso contrario seguiríamos esperando una consolidación más amplia que podría ir hacia los 14,40/14 euros, lo que veríamos también como una oportunidad para comprar con stop ya bajo los mínimos de diciembre, los 13,60 euros. El stop agresivo lo estableceríamos bajo los 14,50 euros.
A largo plazo cabe destacar que Repsol ha encontrado freno en el techo del canal alcista que desarrollas desde hace prácticamente una década, que es lo que podría volver a presionar y lo que debe de superar para abrir la puerta a la subida libre absoluta.