El grupo automovilístico francés PSA anunció este martes un aumento del 47 % de su beneficio neto en 2018, hasta los 2.827 millones de euros, que le sirven para dar un nuevo impulso a su plan estratégico de crecimiento. La cotización de Peugeot (UG.PA)recibe con caídas estos resultados en los primeros compases de sesión, pero su comportamiento en las últimas semanas hay que calificarlo como positivo, tras superar el entorno resistivo intermedio de los 22 euros, lo que aleja el riesgo de una amenazante estructura de techo en forma de cabeza y hombros.
Aún debe de superar los máximos del año pasado para alejar el riesgo de ver una fase correctiva más amplia en próximos meses, pero en el corto plazo una consolidación o corrección es probable que sea una pausa para atacar los 25 euros. Superar ese entorno lo vemos más complicado, por lo que aquellos que pudieran estar posicionados podrían aprovechar para reducir exposición o cerrar.
Después de recuperar más del 61,8% de la corrección de los últimos meses del pasado año, una caída hacia los 20,40 euros sería vista como una oportunidad para comprar. No obstante, para tener evidencias de agotamiento comprador a corto plazo debe de perder los 22,10 euros, y mientras no lo pierda mantiene sus opciones de atacar los 23,30 euros como siguiente entorno resistivo antes de corregir.