Estamos muy pendientes de lo que acontezca en Grifols en el más corto plazo, puesto que es probable que determine el comportamiento de su curva de precios en próximos meses. La corrección que desarrolla la cotización de Grifols a lo largo de las últimas semanas ha servido para que el título haya ajustado ya un 61,80% de toda la tendencia alcista que inició en los 21,30 euros, que son los mínimos del pasado mes de marzo, y que concluyó en los 28 euros. El alcance de una zona de giro potencial tan importante desde el punto de vista técnico, como es la corrección del 61,80% de la serie de Fibonacci, invita a vigilar el título en busca de una ventana de compra, pero por el contrario, si no aparece interés comprador y marca nuevos mínimos decrecientes bajo los 23,90 euros y el soporte decreciente que discurre por los 23,70 euros, mucho nos tememos que profundizará en su corrección. Abriría la puerta a caídas hacia los citados 21,30 euros y probablemente los 19,70 euros, lo que supondría un serio deterioro en sus aspiraciones alcistas. Por tanto, aquellos que pudieran estar posicionados deben de ser conscientes de los riesgos si pierde los 23,90/23,70 euros. En cambio, si consigue superar a cierre de sesión los 24,14 euros, podríamos estar ante un fallo bajista, algo que es alcista, y no nos sorprendería que Grifols tratara de retomar su tendencia alcista principal. En ese caso podrían plantearse compras de forma agresiva con stop bajo los 23,70 euros.