Ligeros descensos en el ecuador de una sesión en el que cabe destacar la incapacidad de la presión alcista para mantener las alzas vistas en las primeras horas. Todo normal teniendo en cuenta que no puede descartarse que antes del rebote que esperamos se produzca una nueva consolidación.
Las ventas vistas la pasada semana siguen invitando a la prudencia, puesto que abrieron un escenario de continuidad lateral bajista que podría dirigirse hacia los mínimos vistos a primeros de agosto antes de que las alzas puedan volver a imponerse. Hablamos del entorno de los 2.890/2.910 puntos de Eurostoxx 50 como principal referencia europea.