Buscar

Festivo

15/02/2016 - 20:05
Más noticias sobre:

A continuación mostramos el último análisis

Se revuelven al alza tras martillear los soportes clave

Situación de corto plazo:

Las importantes subidas que vimos el pasado viernes en Wall Street refuerzan la importancia de los soportes clave que representan los mínimos marcados por los índices el pasado 20 de enero, desde donde consideramos muy probable que veamos una importante reacción alcista.

Solamente los índices tecnológicos perdieron esos mínimos pero esto es algo que no ha sucedido ni en el Dow Jones Industrial ni en el S&P 500, lo cual sugiere que esa caída es poco fiable y esto es algo que suele suceder en muchas ocasiones antes de verse un potente giro alcista. De hecho, la última caída en el Nasdaq 100, tal y como ya señalábamos en el análisis del viernes pasado, encaja con un ciclo completo de cinco ondas en el último gran movimiento bajista de las últimas semanas.

En el chart adjunto puede verse como el Nasdaq Compuesto alcanzó la semana pasada la base del canal lateral bajista que podría estar acotando la consolidación durante los últimos meses, concretamente los 4.200 puntos. Desde ese gran soporte vemos probable que el índice tecnológico forme un importante rebote y es por ello que es un serio candidato a la hora de volver a aumentar la exposición a bolsa.

Situación tendencial:

La tendencia alcista que definen los principales índices norteamericanos desde el año 2008 / 2009 se mantiene vigente y para que exista un deterioro en sus posibilidades alcistas es preciso que una próxima caída perfore los mínimos que se marcaron en la sesión de pánico del pasado 24 de agosto, que llevó a los índices a alcanzar / aproximarse a zonas de soporte fundamental de medio plazo como son los mínimos del año pasado, que podrían ser la base de una consolidación que tiene como techo la zona de altos del año. El alcance de esta zona de soporte la vemos como una oportunidad para comprar bolsa estadounidense partiendo de la idea de que si se pierden estaríamos delante de un cambio de tendencia de medio plazo que obligaría a vender posiciones en EEUU para evitar caídas que podrían llevar al S&P 500 a los 1.600 puntos.