Situación de corto plazo:
Las caídas que vimos ayer no provocaron ningún cambio dentro de la situación técnica en el Eurostoxx 50, que a corto plazo sigue dentro de una fase de consolidación que dependiendo de hacia donde se resuelva nos aportará pistas sobre la dirección más probable que podrían tomar las bolsas europeas en próximas semanas.
En el chart adjunto mostramos claramente el soporte que no debería ser cedido dentro de un contexto de continuidad alcista, concretamente los 3.300/3.325 puntos. También señalamos con un círculo la resistencia cuya ruptura permitiría favorecer un contexto alcista. Hablamos de la zona de los 3.480/3.525 puntos, que es por donde actualmente discurre la tangencia con la directriz bajista. Por encima de la misma al menos cabría esperar una subida hasta los 3.700 puntos.
Situación tendencial:
Los mínimos del pasado mes de agosto en los 2.970/3.000 puntos se han convertido en la línea divisoria que separa un escenario alcista de uno potencialmente bajista a medio plazo. Mientras se mantenga este soporte la tendencia alcista que define la principal referencia europea en plazos medios y largos se mantendrá intacta. Si se perdieran habría que dar por finalizada la tendencia alcista que nació en los mínimos del año 2011.