Azkoyen, en esta fase de volatilidad que están viviendo las bolsas europeas, sigue cumpliendo el guión de un proceso de reestructuración alcista a largo plazo. En las últimas semanas está consolidando posiciones tras detener las alzas en la zona de resistencia clave que suponen los máximos del año pasado. Su cotización se encuentra enmarcada en un estrecho rango lateral y está mostrando fortaleza al mantenerse con cierta comodidad sobre los mínimos del mes de abril, por lo que sugiere que ahí podríamos haber visto los mínimos de esta fase de ajuste. En caso de que la presión alcista sea capaz de batir los 3,21 euros a cierre diario se abriría un escenario de continuidad alcista con próximos objetivos en la zona de los 3,75/4 euros. Un posible giro al alza a corto plazo invita a mantener en vigilancia su comportamiento, esperando la confirmación que ofrecería una oportunidad de incorporación de forma agresiva con stop bajo los 2,90 euros. Por el momento nos mantendríamos al margen, y para aquellos que pudieran ya venir posicionados en tendencia desde cotas inferiores mantendríamos mientras no pierda los 2,78 euros. En caso de ceder dicho nivel, probablemente profundizaría las caídas hacia la zona de los 2,40 euros.