De su mantenimiento depende que no tengamos evidencias técnicas que abran la puerta a un escenario más correctivo que consolidativo en próximas sesiones.
Después de mostrarse incapaces de batir resistencias clave de corto plazo, tales como son los 10.715 puntos en el IBEX 35 o los 3.425 puntos en el Eurostoxx 50, las bolsas europeas corrigen posiciones y ponen a prueba ahora la solidez de los soportes de corto plazo, de cuyo mantenimiento depende que no tengamos evidencias técnicas que abran la puerta a un escenario más correctivo que consolidativo en próximas sesiones.
Hablamos de soportes como son los 3.326 puntos en el Eurostoxx 50 o los 10.325 puntos en el IBEX 35, que es la parte inferior del hueco que generó al alza a comienzos de la semana pasada y que ahora también coincide con la tangencia con la directriz alcista de aceleración. Si el IBEX 35 pierde esta directriz todo apuntaría a que buscaría en próximas sesiones la zona de soporte que mostramos en el chart adjunto y que aparece en los 10.000/10.050 puntos, cuyo soporte análogo en la principal referencia europea se encontraría en los 3.230/3.280 puntos.
Operativamente, una corrección hacia esos soportes indicados la veríamos como una oportunidad inmejorable para posicionarse y seguir aumentando exposición a bolsa europea.