La corrección que define la cotización de IAG a lo largo de los últimos meses tiene visos de que es el clásico pull back o vuelta atrás a probar la solidez de antiguas resistencias, ahora soportes, como son los 3,60 euros, cuya ruptura meses atrás situó al título en la situación técnica más alcista que existe, esto es, en subida libre absoluta.