La corrección que define la cotización de IAG a lo largo de los últimos meses tiene visos de que es el clásico pull back o vuelta atrás a probar la solidez de antiguas resistencias, ahora soportes, como son los 3,60 euros, cuya ruptura meses atrás situó al título en la situación técnica más alcista que existe, esto es, en subida libre absoluta.
La cuestión ahora es ver si la caída alcanza este entorno de 3,60 euros o, por el contrario, las caídas se agotan antes. En este sentido, a corto nos llama la atención el alcance de la base de lo que podría ser una bandera, que es una figura de continuidad alcista. Si desde este entorno de los 4 euros el título consiguiera girar al alza y batir los 4,40 euros no solamente se alejaría el riesgo de ver esos 3,60 euros sino que se abriría una ventana de compra muy interesante.