El Nikkei comienza la semana con un ascenso del 0,70%, hasta los 16.291 puntos, acumulando en el ejercicio una revalorización del 57%, lo que rubrica un gran año de la Bolsa de Tokio. La superación de la zona de los 16.000 permite pensar en siguientes objetivos en los 18.000 enteros, siendo este un escenario que no puede descartarse mientras no se pierdan en eventuales recortes soportes clave que ya pueden elevarse a los 15.100 puntos, esto es, la base de la última consolidación y, por tanto, último mínimo relativo ascendente dentro de la impecable tendencia alcista de medio plazo.