Pocos cambios analíticos al cierre de una sesión de corte consolidativo en la que lo único destacable ha sido ver como el futuro del DAX y del EuroStoxx han ido a buscar apoyo a sus respectivas directrices alcistas, que vienen guiando las subidas durante las últimas jornadas.
En una situación de fortaleza el alcance de estas directrices habría habilitado una nueva reacción al alza de estos índices pero no ha sido el caso de hoy. De hecho, todo apunta a que las principales bolsas europeas prefieren aguardar a que Wall Street sea capaz de rebotar y, después de ver lo que sucedió el pasado viernes, los inversores optan por esperar a que esto suceda.