Si en los próximos días no consigue recuperar la zona de los 8,7/8,4 euros, la operadora podría comunicar durante mucho tiempo.
El anuncio ayer de la cancelación del dividendo para 2012 ha sentado como un tiro a Telefónica, que está sufriendo un nuevo furibundo ataque vendedor que está llevando a su cotización a perder soportes clave en tendencia, que si no son recuperados próximamente es algo que estaría mandando un claro mensaje bajista no ya sólo en plazos cortos sino también en medios.