Hablar de la farmacéutica española no tiene misterios ni secretos técnicos destacables. La situación es tan impecablemente alcista como evidente es la sobrecompra. Y sin embargo no existen divergencias ni indicios de ajuste más allá de un proceso de corto plazo que el valor está resolviendo en lateral mientras el mercado español se hunde, en conjunto, hacia los mínimos de 2011.