Inicio de semana ligeramente a la baja para el Nikkei, que retrocede un 0,14%, hasta los 9.633,93 puntos, en una sesión en la que la presión compradora fue claramente de más a menos.
En efecto, después de abrir con ganancias de alrededor un punto porcentual las ventas comenzaron a presionar y han provocado que al cierre la principal referencia japonesa ceda ligeramente posiciones, lo que sugiere que los alcistas podrían necesitar tomarse un descanso y comienzan a sentir los efectos de la elevada sobrecompra.
Los máximos marcados hoy a la altura de los 9.736 puntos pueden acabar convirtiéndose en un techo temporal en los ascensos de estas semanas. Decimos temporal puesto que todo apunta a que una eventual fase consolidativa a corto puede ser altamente vulnerable y previa a mayores subidas que tienen como siguiente objetivo la zona de techo del movimiento canalizado que guía las caídas a lo largo de los últimos meses y que actualmente aparece por los 10.200 puntos.