Sube un 1,05%, hasta los 9.038,74 puntos. La presión sobre el yen, que sigue fuerte, es uno de los lastres que está encontrando el índice nipón.
Al cierre de la sesión el Nikkei registra una subida del 1,05%, hasta los 9.038,74 puntos. Este tímido rebote es prueba inequívoca de las dificultades que pueden encontrar los alcistas a la hora de lograr formar una reacción al alza en condiciones.
La presión sobre el yen, que sigue muy fuerte, es muy probablemente uno de los lastres que está impidiendo que el Nikkei rebote con más alegría. Con todo, hay motivo para la esperanza gracias a que, tal y como ya planteábamos ayer martes, finalmente se ha confirmado hoy una figura de vuelta alcista en forma de isla. Mientras el hueco generado hoy al alza a partir de los 8.944 puntos, no habrá nuevos signos de debilidad que sugieran una reanudación de las caídas y puede seguir desarrollándose un rebote que tratará de ajustar parte de las últimas y fuertes caídas.