Desde el punto de vista técnico sigo sin ver demasiadas novedades en una semana que ha estado claramente marcada por la fuerte volatilidad y los clásicos vaivenes que suelen producirse ante lo que es conocido como la 'cuádruple hora bruja del año', que es cuando tiene lugar el cuarto y último gran vencimiento del año de opciones y futuros sobre índices y acciones.