El gigante galo Vinci (DG.PA) con las caídas del lunes ha alcanzado una zona atractiva de compra. Tras encontrar freno en la zona de máximos de junio, consolida posiciones en lo que tiene visos de ser una clásica bandera. Su superación podría abrir la puerta a borrar las pérdidas del año, las pérdidas provocadas por la pandemia. Hablamos de ver subidas hacia los 96 y 107 euros.