Moderadas caídas en la renta variable japonesa que no provocan cambios analíticos destacables y encajan con una simple consolidación dentro de un escenario de fortaleza de fondo. El Nikkei se está tomando una pausa dentro de su situación alcista una vez que se ha situado sobre los máximos de los últimos tres años. Cualquier consolidación la veremos como un alivio de la sobrecompra para seguir avanzando hacia primeros objetivos que manejamos sobre los 27.200 puntos, con el objetivo final de vuelta a sus máximos históricos del año 1990 en los 39.000 puntos.