Son muchos los que se preguntan qué es lo que tiene que hacer la cotización de IAG (IAG.LO) para alejar los riesgos de seguir viendo una continuidad de su tendencia bajista y para que se pueda comenzar a valorar seriamente la posibilidad de que los recientes mínimos que estableció en los 1,72 euros han sido un suelo en las caídas.
Pues bien, el primer paso para poder confiar en alzas sostenibles más allá del corto plazo es que la presión compradora consiga superar resistencias que encuentra en los 2,50 y 2,64 euros, que aún se encuentran a un 18% de niveles actuales. Solamente si ocurre eso podríamos comenzar a pensar en un contexto más lateral alcista que bajista en próximas semanas y meses. Mientras tanto el riesgo de que aún podamos ver mayores caídas se mantendrá vigente. Solamente nos plantearíamos promediar si supera al cierre de una semana los 2,64 euros.