En la sesión de ayer fue protagonista IAG (IAG.MC) con destacables subidas que toman cuerpo una vez que ha puesto a prueba los mínimos del mes de mayo, cuya cesión hubiera sido un duro varapalo para sus aspiraciones de reestructuración alcista. Su cesión supondría abrir la puerta a una aceleración de las caídas hacia la zona de los 1,30/1,05 euros, un castigo excesivo que no estamos por la labor de asumir, por tanto, del mantenimiento de los recientes mínimos depende que no recomendemos cerrar y no descartamos hacerlo en próximas sesiones aprovechando el rebote, que podría dirigirse nuevamente hacia los 3 euros si logra cerrar el hueco bajista abierto desde los 2,18 euros.