Situación de trading:
La pérdida del soporte que presentaba la cotización de Indra (IDR.MC) en los 6,60 euros cancela cualquier opción de reestructuración alcista que pudiéramos manejar sin antes ver una probable caída del título a la zona de soporte de medio/largo plazo de los 5-5,50 euros. Hasta ahí no encontramos la base del canal con ligera pendiente bajista que viene acotando la consolidación de la compañía durante la última década. La recomendación es vender Indra para buscar una reincorporación en ese entorno de soporte tan importante, que vemos complicado que pueda ser perdido. De hecho, de su mantenimiento depende que Indra no entre en una tendencia bajista de orden mayor que podría abrir la puerta a caídas que a día de hoy son difíciles de imaginar, como sería la búsqueda de los mínimos históricos del año 1999 y los del año 2002 en torno a los 2,75-3,20 euros.