Situación de corto plazo:
Tono mixto sin apenas cambios significativos en las bolsas europeas en una sesión en la que puso de manifiesto de nuevo las dificultades que está encontrando el rebote para seguir avanzando aunque, de momento, se resiste a concluir y está optando a corto por consumir tiempo, algo que también sirve para aliviar la sobreventa acumulada tras las fortísimas caídas previas.
El rebote de las tres últimas semanas ha encontrado freno en niveles de importantes resistencias y puntos de giro potenciales como son los 2.900 puntos del Eurostoxx 50 (SX5E.ST), que supone la recuperación del 38,20% de Fibonacci de toda la caída previa. Todavía no se puede descartar incluso que el rebote avance hacia lo que sería una recuperación del 50% de esa caída, pero mucho nos tememos que no va a ir más allá.
Para hablar de un agotamiento comprador a corto plazo venimos señalando que lo mínimo exigible es que se pierdan primeros soportes que ayer fueron puestos a prueba y que aparecen en niveles de cierre del lunes en los índices, donde el martes se abrió un hueco al alza. Hablamos de soportes como son los 2.795 puntos del Eurostoxx 50 o los 6.844 del Ibex 35.
Si se pierden al cierre de una sesión soportes como son los 2.795 puntos ya se tendrían evidencias técnicas que sugerirían la conclusión del rebote, algo que se confirmaría con la cesión de soportes de 2.625 puntos de Eurostoxx 50. Si eso sucede mucho nos tememos que tomaría cuerpo el hachazo bajista que venimos insistiendo que veremos en cuanto concluya el actual rebote, y que podría llevar a los índices europeos a probar la solidez de los mínimos que marcaron hace tres semanas.
Situación tendencial:
La tendencia alcista que definía desde el año 2009 el EuroStoxx 50 Total Return (SX5T.ST), que es la versión mejorada del índice tradicional EuroStoxx 50 que contempla la reinversión de los dividendos que reparten periódicamente las empresas que forman parte del índice, se ha cancelado tras asistir a la pérdida de los 6.000 puntos, que eran los mínimos de diciembre de 2018. Es momento de ir aprovechando rebotes para obtener una liquidez que será muy necesaria y preciada para cuando detectemos un suelo y podamos recomponer la cartera con una visión de largo plazo.
Un rebote en las bolsas europeas no nos sorprende ya que se está formando tras alcanzarse entornos de soporte histórico en muchos índices, como los 8.150-8.200 puntos del DAX 30 alemán (mínimos en 8.250), donde se encuentra una antigua resistencia de muy largo plazo como son los son los máximos de la burbuja tecnológica del año 2000 y de la crisis financiera del año 2007-2008. Todo apunta a que este soporte será partido en dos en un próximo hachazo bajista ya que seguimos considerando que es muy difícil que hayamos visto un suelo más allá de algo temporal.
Si atendemos a la estructura de precios que vemos en los índices del Viejo Continente mucho nos tememos que aún no hemos visto lo peor. Por poner un ejemplo, el DAX 30 alemán todavía no ha alcanzado ni siquiera el objetivo de caída mínimo del patrón bajista en forma de doble techo que confirmó tras perder los 10.270 puntos y que aparece en los 7.700 puntos del índice germano.