Las bolsas europeas siguen muy débiles, en estado crítico, si bien es cierto que al cierre la presión vendedora se ha visto contenida y en algunos casos como el del Cac 40 francés y el Dax 30 alemán han recuperado parte de las pérdidas de la sesión volviendo a niveles de apertura, lo que denota cierto agotamiento vendedor en el más corto plazo. Con todo, seguimos considerando que eventuales rebotes serán vulnerables. No podemos considerar aún que un suelo está próximo, pero lo que si tenemos claro es que una vez que se produzca podría ser sostenible por muchos años, ofrecerá oportunidades de compra históricas.