El océano Atlántico no es lo único que tienen en común Estados Unidos y Europa. Sus mercados viven momentos que, aunque difieren en los tiempos, se asemejan en el proceso, ya que ambos están contemplando cómo la época de políticas expansivas de los bancos centrales se acerca a su final.
Aunque en el Viejo Continente todavía no haya comenzado el tapering, ya se están fijando plazos para el inicio de la reducción de los programas de compra de deuda, así como los tiempos para la progresiva subida de tipos. "La subida de tipos será gradual y durará más de lo que se esperaba", apuntaba Víctor Alvargonzález, estratega de inversiones en el Observatorio elEconomista-Sabadell celebrado el pasado lunes. María Cabanyes, vicepresidenta en el grupo de instituciones financieras de Moody's, sugiere una primera subida de tipos "a finales de 2018 o principios de 2019 gracias al crecimiento económico de la eurozona".