El mercado necesita momento, y el momento se consigue entre otras cosas con buenas noticias corporativas.
Entre otras cosas. En este momento esas otras cosas pueden pesar más que los resultados y un alza cercana al 10 por ciento como la que registra Apple esta tarde no resulta gran cosa puesta en el contexto. Y el contexto nos lo da su situación técnica.
Es muy destacable el volumen con el que se está cayendo en las últimas semanas, que si no es de suelo es el preámbulo de una tendencia sostenible a medio plazo que se puede llevar por delante tranquilamente otro 50 por ciento de lo avanzado desde 2003. Y es que desde que hace unas semanas el valor se salía del posible canal bajista de corto/medio plazo - descartando una bandera como pauta consolidativa dentro de una gran tendencia alcista principal -, hay que pensar por un momento en lo que sucede alrededor del valor. La ruptura del citado canal en potencia, por cierto, se llevó a cabo con vela negra y un poderoso hueco de apertura ? como el que presenta el Nasdaq 100 -.
Y ahí está, técnicamente, la clave: en el hueco. Con los mejores resultados del mundo, todo precio bajo ese hueco es un precio bajista. O lo que es lo mismo, y hay que sentarse para escucharlo, el valor es bajista mientras no supere los 130 dólares.