La junta de PT votará el próximo día 30 de junio la oferta de Telefónica por Vivo. Pero muchos de los votos se decidirán antes, por lo que si Telefónica está pensando en mejorar su oferta, los analistas de ING creen que el día 22 de junio será clave para saber si eleva o no la oferta, ya que esta noche, además de que es el día tope para que los accionistas declaren si asistirán a la junta, finaliza el plazo para que los bancos custodios "reciban los poderes con las instrucciones de voto de sus clientes", apuntan.
Aunque Telefónica puede mejorar su oferta hasta el día previo a la junta, el plazo para presentar el voto electrónico finaliza el 25 de junio, de acuerdo con la documentación de Portugal Telecom, por lo que si la teleco española quiere ganar cuantos más adeptos mejor para su causa debe actuar pronto, especialmente a los institucionales, cuyo papel es muy importante en el capital de Portugal Telecom
Como elEconomista viene sosteniendo desde que se anunciara la primera oferta en mayo, todo al final es una cuestión de dinero. De acuerdo con fuentes cercanas a la operación, los accionistas de referencia de Portugal Telecom podrían ver con buenos ojos que la mejorara en unos 500 millones de euros más (ahora ofrece 6.500 millones por la participación que no le corresponde de Brasicel). Los analistas de ING, sin embargo, apuntaban que Telefónica podría triunfar en la junta si la elevara en 1.000 millones, sin que la operación dejara de ser atractiva para la española.
Así, los analistas de ING creen que si Telefónica eleva a 7.500 millones de su oferta, descontando las sinergias que estiman puede obtener (2.800 millones de euros), los créditos fiscales (1.260 millones de euros) y poniendo en valor las ganancias obtenidas por la subida en el precio en bolsa de Portugal Telecom, el coste real en efectivo (sin tener en cuenta deuda) rondaría los 3.000 millones de euros.