Renault EZ-GO: así es el 'taxi' autónomo que quiere la marca gala para las ciudades
EFE , Ecomotor.es
La empresa automovilística francesa Renault ha presentado en el Salón Internacional del Automóvil de Ginebra (Suiza, del 8 al 18 de marzo) su nuevo prototipo de movilidad urbana, el EZ-GO, que consiste en un vehículo compartido autónomo y sin chófer con motorización eléctrica.
Este prototipo, de 5,20 metros de alto y 2,20 metro y 1700 kilos de peso (300 de ellos de la batería), está destinado a circular en ciudad y está pensado para el transporte de hasta seis pasajeros al mismo tiempo, ha explicado el fabricante en un comunicado.
El Renault EZ-GO funciona como un servicio con reserva inmediata a través de una aplicación o desde unas estaciones ubicadas en la ciudad, de acuerdo con lo que proponga el operador.
Dicho servicio puede ser prestado por empresas privadas o públicas, y potencialmente de forma continua, 24 horas y todos los días de la semana.
Es complementario a la posesión de un coche y a los transportes públicos colectivos como el metro o el autobús y "combina la flexibilidad y el confort del transporte individual con la eficacia y la seguridad de los transportes públicos", ha detallado Renault.
Renault EZ-GO es un concept dotado de una capacidad de conducción autónoma de nivel 4, lo que significa que el vehículo es capaz de gestionar la distancia con respecto al vehículo que tiene delante, de permanecer en su carril, de cambiar de carril y de girar solo en una intersección, permitiendo que el conductor ceda sus funciones de conducción en un gran número de escenarios.
A fin de reforzar la seguridad, el Renault EZ-GO tiene la velocidad limitada a 50 km/h, ruedas directrices, una apertura frontal que evita pisar la calzada para subir a bordo, así como al marcado luminoso que aparece en el suelo para indicar dónde se va a situar la plataforma de acceso. Tampoco falta una rampa ligeramente inclinada para facilitar el acceso con un carrito de bebé o para las personas en silla de ruedas o con muletas.
Por otra parte, para preservar el bienestar del resto de usuarios de la ciudad y de las personas que se encuentren en el entorno del vehículo, utiliza: la firma luminosa del coche que señala que funciona en modo autónomo, los mensajes de las bandas luminosas indican, por ejemplo, a los peatones mediante flechas que pueden cruzar la calle, los sonidos exteriores avisan a los peatones y a los ciclistas de su presencia.
Asimismo, es capaz de ponerse a cubierto en un lugar seguro en caso de ocurrir un incidente excepcional en su entorno, ya sea por sí mismo o bien gracias a la conectividad con un centro de supervisión -tecnología desarrollada en el marco de la Alianza Renault-Nissan-Mitsubishi-.
El diseño exterior se ha ideado para maximizar el campo de visión de los captadores del sistema autónomo y redistribuir la luz cenital a través del techo panorámico acristalado.
En el interior destaca la ausencia del puesto de conducción, así como una gigantesca batalla (3,80 metros) y la plataforma eléctrica con baterías bajo el suelo que permiten maximizar el espacio disponible para los pasajeros en el habitáculo.
En cuanto a la conectividad, los usuarios cuentan con Wi-Fi a bordo, al tiempo que pueden recargar su teléfono inteligente (smartphone) por inducción.