Cuatro claves para conducir seguro con fuertes rachas de viento
Ecomotor.es
El temporal 'Bruno' se despidió este jueves de España tras azotar la península con fuertes rachas de viento que dejaron dos víctimas mortales y provocaron caídas de mobiliario urbano. No obstante, todavía hay 16 provincias de 12 Comunidades Autónomas que permanecen en alerta alerta amarilla por riesgo de fuertes vientos y nevadas.
Para hacer frente a tal situación preservando en todo momento la seguridad al volante -máxime en plena operación salida por Navidad-, es imprescindible seguir una serie de consejos para, por ejemplo, saber tomar las curvas de manera correcta cuando haya nieve o hielo en la carretera, así como ceñirse a la retahíla de advertencias que realiza la Dirección General de Tráfico (DGT) para actuar de manera correcta ante fuerte rachas de viento.
Un hándicap especialmente peligroso cuando aparece racheado, ya sea por causa natural o debido a la presencia de obstáculos, tal y como ocurre al adelantar vehículos pesados. De esta manera, cuando el viento llega por la izquierda en el momento de cruzarse con otro vehículo, el empuje se interrumpe instantáneamente por lo que el coche tiende a desplazarse primero hacia el lado desde el que sopla y, posteriormente de forma abrupta, hacia la derecha; mientras que si el aire llega desde la derecha al mismo tiempo que adelanta a un vehículo de grandes dimensiones, el coche es 'aspirado' por este hasta finalizar la maniobra, cuando el viento reaparece dificultándole la incorporación al carril.
¿Cómo prevenir riesgos ante el vaivén del viento?
Tráfico aconseja seguir los siguientes pasos:
1.- Ser observador: fíjese en la vegetación, nubes de polvo, mangas de viento con las que se tope durante su ruta y cualquier elemento que contribuya a discernir la dirección e intensidad del viento.
2.- El volante: sujételo con las dos manos, con firmeza -sin conducir agarrotado- y evitando movimientos bruscos. En cuanto a la dirección, mantener una suave presión en sentido contrario a la procedencia del viento.
3.- Reduzca la velocidad: además de disminuir el ritmo de la marcha, es aconsejable circular en una marcha inferior a la engranada habitualmente a la misma velocidad, pues el motor tendrá así mayor capacidad de respuesta.
Esta práctica, no obstante, debe descartarse en caso de que exista nieve o hielo sobre la calzada ya que con poca adherencia un exceso de aceleración provoca la pérdida de control, máxime si su vehículo es de tracción trasera.
4.- Momentos clave: amén de los hábitos mencionados y del efecto 'aspirador' de los vehículos pesados, la DGT resalta dos situaciones en las que se debe prestar especialmente atención a la circulación:
-Túneles y zonas resguardadas: al salir de una zona que corte el viento -como puede ser un terraplén- el golpe del viento puede pillarle desprevenido y empujarle fuera de su trayectoria.
-Puentes y viaductos: generalmente, están desprotegidos frente al viento, sea continuo o a ráfagas, por lo que el riesgo es mayor si no se está alerta.