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Concursos en redes sociales: un impulso para aumentar las ventas online
- Las marcas pueden usar las redes para mejorar imagen y fidelizar clientes
Eduardo Esparza
El negocio del ecommerce en el sector de la alimentación en España presenta una perspectiva de crecimiento muy positiva para los próximos años. Pero si comparamos la cuota de mercado español con la de otros países europeos, observamos que todavía queda mucho camino por recorrer. Más noticias en la revista gratuita elEconomista Alimentación
Según estudios recientes, en Reino Unido el sector alimenticio online representa un ocho% de la cuota de mercado mientras que en España se encuentra entre el 0,8 y el 1,5%. No obstante, los grandes supermercados comienzan a sumarse a la omnicanalidad, por lo que la industria alimentaria en nuestro país ha experimentado el mayor crecimiento en los últimos años.
Los grandes players del mercado tienen su estrategia para crecer en ecommerce muy definida. Las redes sociales suponen un enorme escaparate que obliga a las marcas a reinventarse constantemente para mejorar la imagen, fidelizar clientes y adquirir nuevos leads. Los concursos y sorteos que se organizan a través de Facebook, Twitter o Instagram han demostrado ser una potente herramienta para lograr estos objetivos. Su efectividad queda demostrada a través de la gran repercusión que obtienen las fotos, cuestionarios y hashtags compartidos por sus clientes más fieles y sus seguidores.
Conocer mejor al cliente
Este tipo de iniciativas ayudan a los ecommerce a conocer mejor al cliente, para poder acercarse a él de una manera más personalizada, gracias a la información que el usuario facilita al inscribirse en un concurso o sorteo. A su vez, a estos usuarios se les brinda la oportunidad de conocer mejor la filosofía de la compañía y el catálogo de productos.
Una práctica habitual en los concursos a través de redes sociales es ofrecer como gancho un lote de productos que acabe de salir al mercado, o que esté a punto de hacerlo. De esta forma, muchos de los participantes que de verdad tienen interés en el producto, tras finalizar el concurso y descubrir que no son ganadores, pueden dirigirse a la página web para comprar ellos mismos el lote completo.
El éxito de estas campañas reside en que ofrece a las empresas una oportunidad de presentar sus novedades e impulsar las ventas. Además, son muchos los usuarios que se animan a seguir los perfiles de la marca organizadora del concurso, con la intención de no perderse el siguiente, lo que resulta una buena táctica para conectar con nuevos clientes.
Contenidos sencillos y directos
Los contenidos generados en las redes sociales a este respecto deben ser sencillos y directos, dejando claro en todo momento las bases del concurso, los requisitos que se deben cumplir como participante y la duración. Es importante conocer el público hacia el cual queremos dirigir la acción y el target del producto, para asegurarnos que estamos eligiendo la red social adecuada y que la estrategia reporte el ROI deseado.
Danone ya lo demostró con su programa Alimenta Sonrisas. Mediante la creación de un sitio web, los usuarios interactuaban entre sí compartiendo recetas, y participando en concursos. Todo ello giraba en torno al concepto emocional de la sonrisa, como motor de bienestar y mejora de la sociedad. Esta campaña llegó a sumar más de 100.000 seguidores en Facebook y 10.000 en Twitter en las páginas creadas ad hoc.
En un panorama más actual, el super online TuDespensa, puso en marcha un concurso en Facebook e Instagram el pasado enero. Lo único que debían hacer los interesados era comentar en el post su receta de Zumo Detox favorita. El comentario que obtuviese más likes ganaba diez euros para gastar en la tienda online. En este caso, no solo se pide al consumidor que participe sino que involucre a sus seguidores, lo que amplía el abanico de consumidores potenciales.
También Ulabox puso en marcha en enero un sorteo en Instagram de Delicias Kitchen que estuvo activo durante una semana, utilizando la excusa de ayudar a sus consumidores en la famosa cuesta de enero. Para participar había que dar me gusta en la imagen donde se promocionaba el concurso, mencionar en los comentarios a tres personas más, y seguir las cuentas de Instagram de Ulabox y Delcias Kitchen, las dos marcas implicadas. El post del sorteo acumuló más de 1.000 me gusta en una semana, con una visibilidad triplicada, ya que los participantes necesitaban implicar a tres personas de sus seguidores. El de Ulabox es un clarísimo ejemplo de cómo aumentar las visitas a una web con un sorteo ofreciendo un gancho como son 100 euros en un super online en un periodo de ajuste económico, como el de después de las Navidades.
Pero la fiebre por los concursos y sorteos en las redes no se detiene ahí. Existen plataformas como concursator.com, que se dedican a actualizar diariamente iniciativas que están activas, con imágenes y links hacia sus desarrolladores. Esta, en particular, se encuentra organizada por secciones, por fechas, incluso por muestras gratis y cupones. Es cuando nos encontramos con este tipo de plataformas cuando podemos afirmar que los concursos y sorteos en redes sociales funcionan. Sobre todo entre los millennials.
El estudio que realizamos en Webloyalty, Las Cinco motivaciones del comprador, reveló que los millennials son el grupo social que se siente más influenciado por sus familiares y amigos a la hora de comprar. El 44% afirmó que mostraban sus compras a través de las redes sociales, y un 68% declaró que no tomarían ninguna decisión importante sin consultarlo antes con su círculo de confianza.
El secreto del éxito reside en transformar estas visitas puntuales en ventas. Para ello, debemos madurar los leads generados mediante la activación del concurso, prestando atención y analizando los datos que hemos conseguido sumar con cada acción. Y para lograr que estos datos se conviertan en oportunidades de negocio, la estrategia debe incorporar ofertas personalizadas que, además, deben ser lanzadas en el momento adecuado.