Las alemanas E.ON y Siemens han decidido poner sus esfuerzos en común para intentar reducir las emisiones de dióxido de carbono a la atmósfera. Para ello han llegado a un acuerdo de colaboración con el que pretenden desarrollar un método económico y eficiente de captura de emisiones de carbono en las centrales eléctricas.Ambas compañías han decidido desarrollar un modelo que tomará como punto de partida un tipo de disolvente con características especiales que proporcionará la base para un nuevo proceso de captura de dióxido de carbono de los gases de combustión de las centrales.Según los cálculos de la compañía, la primera instalación piloto estará operativa en una de las plantas de E.ON en Alemania en el año 2010. No obstante, las dos compañías continuarán con el desarrollo de la tecnología hasta el año 2014. Sin embargo, para ver el nuevo proceso de captura de dióxido de carbono funcionando a escala comercial habrá que esperar hasta 2020.Bernhard Fischer, miembro del Consejo Ejecutivo de E.ON Energie, explica que "E.ON, líder mundial en distribución energética, aporta su experiencia de planificación y manejo de numerosas centrales basadas en combustibles fósiles, así como el lugar dónde se va a construir la central piloto".Aportación de SiemensSiemens, por su parte, proporciona al proyecto una amplia experiencia y conocimiento en materia de ingeniería y ejecución de proyectos de centrales eléctricas. También aporta una excelente capacidad de desarrollo en los procesos químicos, gracias a la antigua Hoechst AG. Según consideran los dos gigantes alemanes, todo ello representa unas condiciones iniciales perfectas para lograr el desarrollo de un proceso eficiente de captura de CO2, además de su integración en los procesos de una central eléctrica.Otra de las ventajas que ha hecho apostar a las dos firmas por este sistema de captura es que no solamente se podrá aplicar en centrales eléctricas nuevas, sino que también se podrá adaptar para utilizarlo en plantas ya existentes, que suelen ser las más contaminantes. Este proyecto conjunto está siendo financiado por el Ministerio de Economía y Tecnología alemán.