La presidenta argentina, de buen ánimo tras su operación
Fernández, de 58 años y quien comenzó el mes pasado su segundo mandato de cuatro años, fue operada con éxito el miércoles.
"Los controles clínicos y de laboratorios realizados se encuentran dentro de los parámetros normales. La presidenta de la nación ha descansado normalmente durante la noche, ha comenzado a alimentarse, a caminar y se encuentra de muy buen ánimo", dijo el portavoz Alfredo Scoccimarro.
La mandataria permanecerá hospitalizada al menos hasta el viernes, en lo que implica el inicio del tratamiento de una dolencia cuyo anuncio conmovió al país y la mantendrá de baja hasta el 24 de enero.
El vicepresidente Amado Boudou está a cargo de la jefatura del Estado argentino.