Un niño hace que se diseñe una chimenea para que entre Papá Noel
Los padres del pequeño se están haciendo una casa a medida, y cuando Leo vio los planos le preocupó que la chimenea no fuera lo suficientemente grande para que bajaran Papá Noel y su famosa barriga, que se agita cuando se ríe como un cuenco lleno de gelatina.
Mientras escribía su tradicional carta a Papá Noel, Leo decidió escribir también una sincera misiva sobre el problema de diseño de la chimenea a Jeremy Paxton, dueño de la finca donde se está construyendo la nueva casa.
La carta, escrita con garabatos infantiles, dice: "Querido señor Paxton, me preocupa que la casa de mi madre no tenga una chimenea lo suficientemente grande. Creo que Papá Noel se quedará atascado. Por favor ayúdeme. Con cariño Leo Park".
Paxton, fundador y propietario de la urbanización de lujo Lower Mill Estate, en la región de Costwolds, en el suroeste de Inglaterra, decidió encargar una fórmula especial para satisfacer las preocupaciones de Leo.
Obviamente el tamaño era la clave para asegurarse que Papá Noel no se quedaba atascado mientras bajaba para rellenar los calcetines, así que Paxton reclutó a un matemático para encargarse del desafío y evitar que el viejo y alegre elfo se pusiera rojo por otro motivo.
La fórmula pro-Papá Noel afrontaba un problema en la entrada de la chimenea: el tamaño de la cintura de San Nicolás contra la anchura de la chimenea en su punto más estrecho.
Para probar la que decían que era la chimenea perfecta, Paxton contó con la ayuda de un doble de Papá Noel ataviado con el traje completo, una grúa, un arnés y un cabestrante para establecer las medidas correctas.
Se invitó a Leo para que observara la marcha del gran experimento.
"¡Vamos Santa!", gritó mientras el falso Papá Noel era elevado en el aire hacia la chimenea.
Unos segundos más tarde Papá Noel penetraba con éxito en la chimenea de la casa a medio construir, saliendo poco después mientras entonaba un cordial "Ho Ho Ho".
"Puedo garantizar que la chimenea es lo suficientemente grande para Papá Noel y todos los que estamos aquí", dijo Leo.
El emocionado chaval levantó un pulgar hacia el doble de San Nicolás y corrió a abrazarle.
"Estoy absolutamente encantado no sólo porque Papá Noel cabrá por la chimenea, sino porque el pequeño, Leo, me dijo: 'Éste ha sido el mejor día de mi vida', lo que hizo que todo valiera la pena", dijo Paxton.
La familia Park no podrá habitar su nueva casa de vacaciones hasta el próximo diciembre, justo a tiempo de dejar la leche y las galletas preparadas para su visitante navideño.