Construcción Inmobiliario

Autobuses de la EMT rodearán la manzana de Canalejas y tendrán paradas en Sol



    Madrid, 13 oct (EFE).- El acuerdo institucional alcanzado en la Operación Canalejas, que reduce la edificabilidad y el impacto visual del complejo, suprime la planeada estación subterránea de autobuses, que rodearán la manzana frente a la tienda de Apple y volverán a tener paradas en Sol, pero "sin hacer regulación" allí.

    El acuerdo de "retranquear" los cuatro lados de los cuerpos superiores del complejo Canalejas reducirá la sensación de "invasión" y "agresión visual" en esa zona próxima a Sol, haciéndolo "más amable e integrado en ese entorno protegido, según la directora general de Patrimonio de la Comunidad de Madrid, Paloma Sobrini.

    Para el concejal de Desarrollo Urbano sostenible, José Manuel Calvo, el acuerdo es fruto "de un trabajo colectivo, que satisface al conjunto de los agentes" que han intervenido, ha dicho en rueda de prensa junto a responsables del Grupo Villar Mir, del Colegio de Arquitectos de Madrid y del Estudio Lamela de arquitectura.

    Este retranqueo reduce la edificabilidad y volumen de negocio, pero la constructora OHL -Grupo Villar Mir-, que ha invertido 500 millones en el proyecto, ha aceptado reformar el complejo, que queda ahora en 47.000 metros cuadrados de uso mayoritario del hotel de lujo con 205 habitaciones, 15.000 metros de centro comercial, y un estacionamiento para 400 automóviles.

    El responsable del proyecto, Francisco Meliá (Villar Mir) ha reiterado que la cadena Four Seasons "está comprometida con el complejo proyecto y lo ve como una prioridad", y ha recalcado que Four Seasons, con 100 hoteles en el mundo, tiene experiencia en gestionar edificios históricos en París, Budapest, Praga, Milán e Istambul.

    Las intenciones de la empresa son revitalizar el centro de la ciudad con un proyecto que generará 40 millones para las arcas municipales a través de IBI, impuestos y tasas de construcción; y que creará 5.000 empleos directos.

    Sobre la admisión a trámite de una demanda para paralizar las obras, Meliá ha dicho que no han recibido "ninguna comunicación del auto" y se han enterado por la prensa, pero considera que se trata de "una demanda civil", dado que el Ministerio "ya ha denegado la existencia de un expolio" de patrimonio.

    Calvo, por su parte, ha asegurado que el acuerdo "garantiza la seguridad antes y durante las obras" y que la responsabilidad en esta materia corresponde a "la propiedad del edificio".

    A su juicio, este acuerdo acalla las acusaciones de que el gobierno de Ahora Madrid pretendía paralizar las grandes operaciones urbanísticas, y que el objetivo del Ayuntamiento es "la evaluación y corrección de los aspectos discutibles" de los proyectos que se han encontrado en marcha.

    También ha destacado que las paradas en superficie, que estarán más cercanas a la Puerta del Sol, responde a las demandas de los conductores de la EMT y que los autobuses no estarán allí "un rato parados regulando", que es lo que provoca atascos.

    Según Calvo, las soluciones de movilidad "aún no son definitivas" y las están elaborando los expertos, y que la superficie peatonal en la plaza de Canalejas "es mayor" ahora que en el proyecto anterior.

    Sobrini ha detallado que el expediente incoado por la Comunidad por "elementos protegidos retirados inadecuadamente" por OHL, está paralizado desde que la Fiscalía "entró a pedir información".

    A este respecto, Lamela ha destacado la "complejidad extrema" de la obra y el "abandono total" en que estaban los seis edificios, dos de los cuales son Bienes de interés cultural (BIC), y que "si ha habido algún fallo, se ha dialogado con las administraciones".

    Meliá ha explicado que, tras ejecutarse las fases de demolición, cimentación y excavación, este acuerdo permite obtener la licencia municipal para la fase 2, que es la definitiva.

    Carlos Lamela ha detallado que la mayor reducción es en las viviendas, que pasan de las 30 proyectadas a 22, y ha calificado de "histórica" la posibilidad de intervenir simultáneamente en seis edificios históricos de Madrid, donde no se han construido hoteles de lujo desde los años setenta.

    Sobrini, por su parte, ha destacado que se "seguirá la ley al pie de la letra" en las fachadas protegidas y que, en los dos edificios que son BIC, la protección obliga también mantener la primera línea de soporte, o primera crujía".

    Para la directora general, se abre una "nueva etapa de colaboración" entre la Comunidad y el Ayuntamiento para "trabajar juntos y buscar soluciones", y el acuerdo es "el pistoletazo de salida a un proyecto que ha tenido muchos reveses".

    Para el Colegio de Arquitectos, "es un gran día para la ciudad, que se renueva sobre si misma, no se extiende, crece interiormente" y busca soluciones para que su patrimonio siga "vigente y se actualice", ha concluido Carlos Rubio.