El campo nos ofrece enormes posibilidades. Y esta es la historia de Blanca, que un día decidió irse a vivir a la naturaleza alejándose de su familia y de una gran ciudad. Agobiada por el enorme ajetreo de la misma, del tráfico, de la contaminación, Blanca se fue al campo para vivir y experimentar una nueva vida. Pide aquí el Dossier de Ideas de Negocios para emprender en el campo, inspiradas todas ellas en las vivencias reales de Blanca. Y tu vida cambiará….
Su profesión de abogado enseguida se truncó y tuvo que ponerse a buscar nuevas oportunidades. Al principio no las vislumbraba, al igual que todos aquellos que viven en el medio rural. Pero su pasión por emprender y tener que buscarse la vida le llevó a un camino donde no tenía otra opción que crear una empresa en algo relacionado con el campo y la naturaleza.
Intentó varias cosas e iniciativas pero no acababan de cuajar o simplemente daban muy poca rentabilidad e ingresos. Una de las ideas fue dinamizar la vida en los pueblos con actividades extraescolares para todos los estudiantes y padres en general. Nadie se apuntó porque no querían pagar, y eso que resultaba muy barato y económico. Buscó nuevas ideas y si bien algunas le proporcionaba algo de resultados, Blanca quería algo más consistente en beneficios. Buscaba el gran proyecto emprendedor en el campo.
Y al final apareció la idea. Se trataba de darle un nuevo enfoque a las actividades campestres, aquellas que se pueden organizar con más bien nada a nivel de recursos y que tantos resultados ofrecen a los visitantes de las ciudades. Lo tenía todo al alcance y solo necesitaba amoldarlo y darle un toque profesional a todos los elementos que crearían una especie de Parque Temático Rural. Desde animales, actividades deportivas, el mundo campestre, hasta la gastronomía. Todo ello en forma de áreas temáticas bien organizadas para que el visitante pudiera disfrutar de todo lo relacionado al campo en una especie de circuito de entretenimiento rural.
El primer año fue el de montar dicho Parque y empezar a contar con los primeros clientes. Hoy ya factura 80.000€ y vive de su propio proyecto en su finca campestre.
