
Hoy conversamos con el emprendedor Adrián Rodríguez, un gallego que se ha propuesto llevar la diversidad racial, social y cultural a los emoticonos a través de su app Emoji & Face. Porque no todos somos iguales, no todas las caras tienen que ser un círculo amarillo; triángulos, cuadrados, pentágonos, hexágonos, rombos y estrellas de distintos colores dan vida a divertidos personajes.
1.- ¿Qué te llamó la atención de iniciarte como Emprendedor? ¿Naciste o te hiciste Emprendedor?
Pues no estoy seguro si nací o me hice emprendedor. Creo que todos podemos llevar un emprendedor dentro, pero muchas veces sentimos que no estamos en la situación adecuada para llevarlo a cabo, séase por situaciones familiares o personales. Pienso que emprendimiento es movimiento, sentirse vivo. Yo creo que es muy importante, cada uno con sus ilusiones, darse una oportunidad de conocerse mejor a uno mismo y seguir un poco sus instintos. No digo que las cosas se hagan sin pensar, porque tal vez después nos sintamos peor que estábamos si fracasamos. Creo que debemos escucharnos diariamente pero fluyendo como cuando hacemos una actividad deportiva, no obsesionarnos con ello. Esto se “cuece” en el cerebro a fuego lento, creo que debemos ser realistas con nosotros mismos pero también dejar atrás los miedos. Por lo que pude comprobar, lo que más me llamó la atención es que esos miedos iniciales daban paso a una sensación de creer que puedes llegar a donde te lo propongas o al menos a romper barreras que tenían mucha menos importancia de lo que tú creías inicialmente. Por ejemplo, en mi caso, con el inglés. Creemos que por no saber un idioma nos limita mucho, sin embargo, siempre hay soluciones para eso. La gente inteligente en China, España, EEUU o en Bután lo es de la misma manera sabiendo más o menos idiomas. El idioma te permite comunicarte mejor y te facilita las cosas, como conseguir puestos de trabajo, pero no te hace más inteligente. Yo creo que debemos tener calma para reflexionar las cosas bien pero, al mismo tiempo, darnos la oportunidad de movernos, porque el miedo es el alimento que nos paraliza.
2.- ¿Crees que viven mejor los emprendedores?
Creo que viven mejor las personas que se permiten el lujo de seguir sus inquietudes, sus ilusiones. Una persona que está con su familia disfrutando de ella y de las actividades y educación de sus peques, una persona que se despierta con una sonrisa en el campo cuidando ovejas o una persona que goza con sus nuevas ideas de negocio… todas, para mí, viven igual de bien. Y creo que viven peor las que están en un sitio en el que no quieren estar, aunque a veces tengo claro que no es nada fácil, y tengo mucho respeto a todo el mundo porque las situaciones no son iguales para todos.
3.- ¿Si hubieras podido, habrías empezado antes como emprendedor?
He podido. Tuve facilidades desde hace años para hacerlo. Pero tampoco creo que estuviera preparado de esta forma, y lo digo por la confianza interior que ahora creo tener. Tal vez hubiera empezado y tal vez al mínimo problema lo hubiera dejado. O hubiera desistido después de un cúmulo negativo de circunstancias. Lo de emprender que nadie piense que es “jauja”. Tuve muchas trabas en el camino pero a cada una inmediatamente le buscaba soluciones. Hay una cosa cuando empiezas. Es como cuando empiezas a andar, no hay vuelta atrás. Te envuelve todo lo que vas descubriendo de ti mismo, los nuevos retos, la nueva fuerza que tienes. A veces dudas, sí, pero sabes que puedes seguir y alcanzar los objetivos que te propones, que en el fondo son con uno mismo. Mi camino para mí fue una odisea pero no cambiaría nada, os lo prometo. Todo eso es un aprendizaje impagable.
4.- ¿Qué es lo que más valoras de tu nueva vida como Emprendedor?
Como he dicho antes, darme cuenta de que lo que pensaba que podía hacer, realmente lo puedo hacer. No tiene nada que ver con el éxito tal como se entiende socialmente. Este es el éxito que más repercusión tiene en uno mismo. Luego, también valoro en igual medida la gente buena que vas encontrando por el camino, la afinidad con otras personas que entran en tu vida, y la gente auténtica que estuvo ahí desde el principio contigo y que puedes discernir perfectamente cuanto más te mueves.
5.- ¿Qué le recomendarías a alguien que se está planteando el empezar a Emprender?
Si esa persona realmente quiere emprender yo le diría que ya está en el camino, que tarde o temprano acabará haciéndolo. Que se escuche mucho. Pero que no haga caso a excusas que vienen de proyectar la vista demasiado lejos, eso alimenta el miedo. Yo creo que algo fundamental es ser realista también.
Lo primero es saber en qué podemos ser buenos con respecto a los demás, qué podemos aportar nosotros. Negocio es aportar algo nuevo a los demás, es un trueque.
Luego estudiar un poco el mercado, qué expectativas reales puede tener nuestro negocio para ser interesante a cierta comunidad. Aquí no se trata de que tengan que ser macroempresa para poder emprender. Un escritor de un solo libro ya es un emprendedor, llevando a cabo su ilusión.
Asimismo hay que tener en cuenta qué inversión debemos realizar en caso de que salga mal el negocio, para no acabar frustrados con nosotros mismos. Vamos de vacaciones y gastamos una cantidad. Lo disfrutamos y a nadie le pesa ese dinero. Pues lo mismo debería ser en el caso de un emprendedor.
Pienso que un emprendedor también debe de ser perseverante, y yo creo que una vez que se empieza es algo que va un poco implícito ya. Pero también debe de escuchar los mensajes de fuera, y las ideas muchas veces si no tienen la cabida que esperamos deben moldearse o cambiarse. En mi caso esta idea dentro de este mundo de las apps nada tiene que ver con la idea inicial, y poco con las posteriores. A raíz que uno va experimentando y aprendiendo, también las ideas que tenemos van evolucionando para adaptarse mejor a los objetivos del mercado.
Una de las conclusiones a las que llegué en esta primera experiencia como emprendedor y que me parece importante compartir con todos, fue que las personas más cualificadas y que más me han ayudado tenían un patrón común todas: la calidad humana e involucrarse contigo de una manera sorprendente. Puede resultar curioso; a mí personalmente echando la vista atrás me lo resultó. No sé si es por esa tranquilidad que le reporta a uno el saber hacer algo muy bien, seguramente también por todo lo que han tenido que pasar para llegar hasta ahí y el conocimiento del terreno que tienen hoy en día, pero os aseguro que eran los mejores profesionales los que te hacían sentir como en familia, en un proyecto común.
Puedo decir, por último, que soy totalmente autodidacta, es decir, que si yo lo puedo hacer cualquiera puede. No tenía ningún conocimiento de este mundo hace algo más de un año. Lo único que hice es adaptar otro tipo de conocimientos o filosofía de vida a este mundo de las apps, empaparme de información y discernir cual era desechable y cual me podía aportar muchísimo. Llegué así a contactar con gente increíble, yo creo que con la mejor, como Oscar Sánchez y su equipo de Tech Sales Group. Después el rompecabezas va tomando forma…