El samaritano y la bolsa
Me dice mi hermana Isabel que he incumplido mi promesa de escribir todos los días. Esto debe ser amor de hermano. Pero yo creo que hacerlo cinco días a la semana es suficiente. De todas formas, quiero agradeceros el seguimiento. Según los datos que me pasan es uno de los sitios más visitados del web de elEconomista. Como véis, aceptamos también las críticas. Tengo un viejo compañero, al que me negué a despedir durante dos veces en mi anterior trabajo por respeto a su familia, pese a la insistencia de la dirección de la empresa ante su reiterada falta de profesionalidad, que me lo agradece de esta manera. No me arrepiento, lo volvería a hacer, me siento mejor cuando hago labores de samaritano. Aún recuerdo cómo me dijo, con voz y piernas temblorosas, que por Dios no lo echara, que no tenía a dónde ir. J, no se debe jurar en vano.
Pero volvamos a lo importante, hoy quiero hablaros de la bolsa. No os entusiasméis. Cómo os dije en un blog anterior, ni era el momento de irse cuando el petróleo se disparó, ni ahora es el momento de entrar, porque durante esta semana vaya a subir. Podéis aprender de Warren Buffet, un samaritano que se hizo multimillonario invirtiendo en bolsa, del que este martes publica una historia elEconomista. La fórmula es sencilla, hay que hacer lo contrario de lo que hacen los demás. Eso siempre funciona en bolsa. ¡Y en periodismo!
8 mayo, 2006 a las 9:47 pm
No pretendo corregir el magnífico texto del mensaje pero si opinar sobre algo que oigo continuamente sobre Warren Buffet.
Warren Buffet es un inversor .Pero no un inversor de bolsa.
El casi nunca ha comprado acciones de entidades para sus portafolios. Su genialidad ha estado en la compra de empresas, y altas participaciones en las mismas.Participar por sus porcentajes de la marcha de la misma y pocas veces vender.
No es en resumen gestor bursatil.
Saludos Juan Manuel